Guía de Viaje de Malasia
Pon a Malasia en tu lista de lugares que visitar si no lo has hecho ya – es uno de los países más espectaculares que puedes visitar en el sureste de Asia y cuenta con plantaciones de té, playas de arenas blancas, aguas cristalinas, y selvas tropicales vírgenes, ¡todo en uno! Además, Malasia tiene un patrimonio cultural fascinante, con una mezcla de malayos, chinos, musulmanes y cristianos que constituyen su tejido cultural diverso. Esto no solo significa que su cocina sea para chuparse los dedos, sino que además cuenta con costumbres y tradiciones vibrantes que siguen estando presentes en la actualidad.
¿Por qué deberías visitar Malasia?
Kuala Lumpur se ha convertido en uno de los nodos más grandes para vuelos internacionales así que volar a Malasia no debería ser ningún problema. Encontrarás cientos de vuelos con destino a esta capital cosmopolita, ya vueles desde un país occidental o desde alguna otra parte de Asia.
La aerolínea nacional Malaysia Airlines es una excelente opción para vuelos cómodos y asequibles mientras que otras aerolíneas de bajo coste como AirAsia y Tiger hacen los recorridos más cortos a precios todavía más baratos, especialmente las conexiones entre la península y el este de Malasia, como Kuching y Kota Kinabalu.
Siempre es buen momento para visitar Malasia
Gracias a la situación de Malasia en el ecuador, se puede describir el clima del país como ‘tropical,’ con clima cálido y húmedo a lo largo de todo el año.
Sus dos estaciones, la seca y la húmeda, están marcadas por los monzones del suroeste y el noroeste (además de los tifones) pero no dejes que eso te eche para atrás, porque merece mucho la pena. Además, ¡la lluvia es cálida de todos modos!
Sin embargo, asegúrate de planear tu viaje teniendo en cuenta las estaciones si quieres visitar las magníficas islas de Malasia. Puede que algunos ferrys y barcos rápidos no estén en funcionamiento y si planeas ir a bucear, puede que la visibilidad en el agua no sea tan buena.
Lo mejor de toda esa lluvia es que da igual cuando vayas de visita, las selvas estarán densas y exuberantes, ¡y esas plantaciones de té estarán bien verdes! Solo asegúrate de traer un buen chubasquero para tus caminatas.
Malasia tiene algo para todo tipo de viajeros
Ya estés visitando Malasia para tu luna de miel, llevando a tu familia de vacaciones o recorriendo el país con tu mochila y poco dinero, todas tus necesidades estarán bien cubiertas.
Para los que andan cortos de dinero, hay hostales que ofrecen dormitorios compartidos por entre 25-50 MYR, y habitaciones privadas desde unos 60. Encontrarás opciones de gama media con hoteles y casas de huéspedes que ofrecen habitaciones con baño privado por unos 75 MYR – generalmente con aire acondicionado y desayuno incluido. Recuerda que las grandes ciudades como Kuala Lumpur, siempre tendrán precios más altos para todo tipo de presupuestos.
En las islas, como Langkawi y las islas Perhentian, podrás encontrar impresionantes bungalows frente a la playa y resorts de lujo con vistas constantes de aguas turquesa y arena blanca en tu puerta. Aquí puedes esperar que las habitaciones empiecen a partir de los 90 MYR o más. Sin duda, no tendrás que esforzarte mucho por encontrar lujo en el paraíso malayo.
Por otra parte, el alojamiento en los parques nacionales y en las selvas, es menos lujoso y las comodidades habituales pueden ser mínimas, siendo lo más fácil que encuentres dormitorios compartidos de plan abierto y alojamiento básico. Pero como estás aquí por la experiencia y no por el alojamiento, puede que tengas que lidiar con duchas a base de baldes de agua y redes para evitar a los mosquitos.
¡Atención sibaritas!
Otra de las cosas que destacan de Malasia es su variada cocina. ¡Los amantes de las especias, el arroz, los huevos, el pollo, y el pescado fresco no van a pasar hambre aquí!
La cocina malaya está inspirada por su patrimonio multicultural así que te encontrarás platos chinos de arroz, curris hindúes, y sabores malayos mezclados en armonía para crear platos muy apetitosos.
Una de las mejores maneras de experimentar esta cultura es probando la comida callejera – por ejemplo, con frecuencia te encontrarás a mujeres inclinadas sobre woks humeantes salteando vegetales frescos y fideos para hacer un mee goreng (un plato a base de fideos amarillos muy popular) por el que te cobrarán solo 5 MYR. Nasi lemak, un plato típico de Malasia, es otro plato exquisito popular hecho con anchoas en pasta de gambas. Si tienes que comer algo rápido, los satay a la parrilla batu maung (pinchos de carne) están por todas partes y son deliciosos, por no mencionar ridículamente baratos.
Dónde ir en Malasia
No has visto Malasia sin...
Cuando planees ese viaje a Malasia, hay tres destinos que te recomendamos que no te pierdas para aprovechar al máximo el increíble paisaje de playa y selva, vida salvaje y marina, y son Kuala Lumpur, la cosmopolita capital; Borneo, hogar de las selvas más vírgenes; y el paraíso de las islas de Langkawi y Perhentian.
Kuala Lumpur
Pasa unos días explorando Kuala Lumpur – que no es tan sofisticado como Singapur, pero tampoco tan agobiante como Bangkok – y que ostenta restos del dominio colonial británico por todas partes, una variedad de mezquitas musulmanas y un vibrante Chinatown lleno de color. Coronando el horizonte de la ciudad están las Torres Gemelas Petronas, con una altura de 451 metros, que cuando se iluminan por la noche, se pueden ver desde toda la ciudad. Consejo de experto: hay unos cuantos bares geniales en las alturas de ciertos edificios para disfrutar de vistas increíbles durante la happy hour). Hagas lo que hagas, la diversidad de esta capital te tendrá entretenido desde la mañana a la noche.
El Borneo Malayo
De la jungla de asfalto a la jungla tropical, un vuelo bien corto te lleva de KL a Kuching o a Kota Kinabalu, para explorar el Borneo malayo, hogar de los bosques tropicales más antiguos del mundo, que datan de 140 millones de años. Aquí encontrarás una fauna y flora increíble desde orangutanes en peligro de extinción a rinocerontes de Sumatra, elefantes, lagartos, serpientes pitón, tarántulas, ¡lo que se te ocurra!
Una de las mejores opciones que tomar es la de hacer una excursión a la jungla de varios días con un guía y explorar la maravillosa flora y fauna con tus propios ojos.
Islas tropicales
Si estás pensando en ir a la playa, a Malasia no le faltan unas cuantas islas tropicales. Ponte en marcha hacia Langkawi, el paraíso tradicional de postal de Malasia, un archipiélago a las afueras de la costa occidental al que la gente ha estado viniendo durante años para disfrutar de sus playas de arena blanca y aguas turquesa.
Claro que si buscas un lugar menos común, las islas Perhentian son una excelente alternativa en la costa este de la península y si planeas bien tu viaje, puede que veas cómo salen las tortugas de su cascarón en Turtle Beach (la isla es conocida por sus nidos de tortugas).
Donde ir si te gusta...
Lo que realmente hace destacar a Malasia de entre los países vecinos en el sureste de Asia, es la cantidad increíble de actividades que puedes disfrutar para experimentar los diversos paisajes, flora, fauna y vida marina.
Buceo
Malasia es “un lugar a tener en cuenta” en el circuito de buceo con arrecifes y corales majestuosos para los que gustan de explorar el mundo submarino. Algunos de los mejores lugares para el buceo se encuentran en la costa este de Borneo, en Sipidan, donde el Parque Nacional Marino y sus esfuerzos de conservación protegen los dramáticos niveles marinos que albergan peces exóticos, tiburones, tortugas y rayas. Tendrás que reservar con antelación tu pase de buceo ya que se venden a diario y están limitados para minimizar el impacto medioambiental. Extiende tu buceo unos cuantos días para visitar los lugares de buceo en el vecindario de las islas Mabul y Kapalai.
Senderismo y montañismo
Malasia cuenta con algunas montañas increíbles cuyos picos y cimas están pidiendo que los asciendan. El Monte Kinabalu es la montaña más alta de Malasia, con 4095.2 metros. Únete a un ascenso guiado de dos días y una noche y quédate arriba en la montaña antes de despertar para conquistar la cima al amanecer. No es tarea fácil, no te vamos a engañar, pero una vez llegues a la cima, te sentirás en la cumbre del mundo y podrás divisar un amanecer increíble.
Otra aventura de montaña en Borneo es el Parque Nacional Mulu donde las excursiones guiadas te llevarán por el parque nacional, sus increíbles sistemas de cuevas, con paseos por la selva y ascenso a las cumbres, unas increíbles agujas de caliza dentada. ¿Sabías que las cumbres aparecen en el diseño del billete de 100 MYR?
Senderismo por la selva, flora y fauna
Algo a tener en cuenta cuando visites Malasia es el aumento (a velocidad de vértigo) de la deforestación que está teniendo lugar para plantar más aceite de palma – este es un problema enorme que no solo está terminando con las selvas tropicales sino con la flora y la fauna del lugar. Te sugerimos que te apresures a visitar las selvas exuberantes mientras puedas, ¡hay tanto que experimentar y aprender! Solamente asegúrate de que estás colaborando con compañías éticas y sostenibles cuando reserves tus excursiones.
Algunos de tus viajes favoritos por la selva serán los que hagas por el Valle Danum, un importante centro de investigación donde puedes quedarte con el equipo en sus instalaciones, y unirte a los paseos por la selva, las charlas, y los safaris nocturnos. Para una experiencia más pantanosa, la selva del Río Kinabatangan también puede explorarse en barco. Te vas a alojar en un campamento flotante sobre soportes dentro del agua – ¡en medio de todo ello!
Patrimonio histórico colonial
Para ver la historia y patrimonio de Malasia, visita las Cameron Highlands para tener una aventura de senderismo más discreta, pero también para aprender sobre la historia del país en las plantaciones de té. No solo te ofrecerá fantásticas vistas, sino que esta experiencia te dará una buena idea de la época colonial británica.
Georgetown y Malaca son otras dos ciudades que deberías poner en tu agenda si quieres aprender más sobre el rico pasado de Malasia a través de su fascinante arquitectura, museos y templos.
