A diferencia de los autobuses o los taxis que tienen muchas compañías donde elegir, el servicio de tren suele formar parte de una sola compañía en cada país. Como el servicio de ferrocarril requiere de una gran cantidad de infraestructura, la mayoría de las compañías son estatales y forman parte del sistema de transporte nacional.
Una de las mayores ventajas de viajar en tren es que las estaciones de tren suelen estar ubicadas en lugares convenientes o cerca de grandes ciudades o áreas urbanas. Desde el momento de su llegada a destino, los viajeros se encontrarán cerca de todos los servicios que puedan necesitar como hoteles, supermercados y hospitales.
Si viajas con mucho equipaje, los trenes son tu mejor opción. El límite del peso de tu equipaje en los trenes es bastante más flexible, lo que te permite llevar varias maletas contigo.
Los trenes especiales o de lujo cuentan con bastante espacio para las piernas, lo que te permite estirarlas y relajarte. Estos asientos se pueden comparar en comodidad y espacio con los asientos de primera clase en los aviones.
De manera similar a los autobuses, los trenes pueden proporcionar diversas amenidades para hacer tu viaje más cómodo y agradable. Los trenes modernos cuentan con servicio de WiFi, un mostrador con chucherías y un bar. Los servicios a bordo pueden salvarle la vida a aquellos que se mareen con facilidad.
Por último, a diferencia de los autobuses y de otros medios de transporte por tierra, los trenes no suelen sufrir accidentes.